Autónoma. Entre essas personalidades,como, por exemplo por Don Manuel Fraga Iribarne, Presidente da Xunta de Galicia tive a honra de ter uma agradável reunião com Don António Mª. Rouco Varela, Arcebispo de Santiago que a propósito do Ano Santo Compostelano se dignou escrever uma mensagem.
EL ARZOBISPO
DE
SANTIAGO DE COMPOSTELA
A LOS LECTORES DEL LIBRO "ANO SANTO COMPOSTELANO"
Hermano y amigo lector
En vesperas de la apertura de la Puerta Santa de la S.A.M.I. Catedral de Santiago de Compostela, con que se inaugura el ANO SANTO JACOBEO 1993, el Director de Portugaliza, D. Eduardo Serafim, pone en tus manos este libro para ayudarte a mejor entender y vivir la Peregrinación al Sepulcro de Santiago el Mayor en Compostela.
El que emprende «el Camino de Santiago» desde cualquiera de sus puntos históricos de partida o lo toma en cualquier estación de sus trayectos tradicionales, entre os que ciertamente no es el menos importante el Camino Português, va a seguir un itinerario abierto y confurado por las huellas de los peregrinos que buscaban la Tumba del Apostolo Santiago en un punto lejano del «Finis Terrae» de Occidente. El «Camino de Santiago» es uno de los grandes «Caminos de la peregrinación Cristiana». Fruto ubérrimo de una Fe vivida con un hondo sentido pentencial y con un horizonte de amplia y neta Catolicidad. Fe que dio a luz en los albores de la Edad Media a Europa, como contienente homogéneo cultural y espiritualmente y sin la cual son impensables España y sus pueblos. Galícia ha llegado, incluso, a ser conocida como «Jakobsland», como «Terra de Santiago».
No hay, pues, mejor metedologia para aprovechar plenamente «El Camino de Santiago» que la de la oración. Es más, solo se conseguirá saborear todo el caudal de experiencias humanas, personales y comunitarias, que han originado «El Camino de Santiago» se el caminante lo concibe y lo realiza desde el comienzo como un itrinerario exterior y interior de toda su vida hacia Dios. El que no se cierre al lenguaje del paisage y de la naturaleza, a la comunicación con el otro - compañero de andadura, peregrino, hospedero, habitante del lugar... - al testimonio sumamente expressivo de ese otro paisaje histórico-artístico, que la Fe y la Cultura han creado con belleza inigualable a lo largo del Camino, ese se encontrará con la Palabra del Dios vivo, con Jesuscristo, el Señor, con su Evangelio, el de la Buena Nueva de la Salvación. Se puede iniciars «El Camino de Santiago» inmersos en las duda religiosa, en la oscuridad vital, en la desesperanza de la existencia rota, alejados de Dios... Todo ello no será obstáculo para una vivencia profundamente humana y cristiana de su recorrido, con tal que no pongamos al corazón el cerrojo de la superficialidad, de la ligereza, del orgulloso amor proprio o, lo que es peor, de la supercheria y de la avidez de engañosas sensasiones. El êxito o el fracaso del «Camino de Santiago» dependem de si el caminante sabe o no adoptar la dimensión cristiana del peregrino e si logra degustarla hasta el final de sus posibilidades. Como lo hicieram los Santos peregrinos, tan conocidos y tan queridos - Santa Isabel de Portugal, a Rainha Santa! -, en la Historia del Camino. Como lo mostró ejemplarmente con validez universal Maria, la Madre de Jesus,al vivir su vocación de Madre de Dios y Madre nuestra como una «peregrina de la Fe». A cuantos ha servido la peregrinación a Santiago de Compostela como la ocasión y la vivencia providencial para recobrar en la cercania de la Virgen, la Fe perdida!.
Agradecemos ao Autor este libro, que representa una buena ayudapara vivir la grande aventura, humana y cristiana del Camino Jacobeo, como un itinerario de oración, como una via egregia de encuentro con Nuestro Señor Jesuscristo, «Camino, Verdad y Vida de los hombres . Como vienem haciéndolo constantemente los buenos hijos de la querida hermana Portugal y lo harán especialmente, sin duda, en el Año Santo Compostelano 1993, para lucrar las gracias extraordinarias que el Santo Padre se ha dignado conceder para los que, durante este año de «La gran perdonanza», visiten el Sepulcro de nuestro Santo Apostol.
Desde Santiago de Compostela, desde la Iglesia del Apostol encomendamos y bendcimos a todos sus lectores y a todos los que se ponem en camino com el espíritu de peregrino
jacobeo para llegar a el su Sepulcro, el del primero de los Apóstoles que «bebió» el Cáliz del Señor.
Texto tirado do livro da autoria do escritor Eduardo Serafim
Hermano y amigo lector
En vesperas de la apertura de la Puerta Santa de la S.A.M.I. Catedral de Santiago de Compostela, con que se inaugura el ANO SANTO JACOBEO 1993, el Director de Portugaliza, D. Eduardo Serafim, pone en tus manos este libro para ayudarte a mejor entender y vivir la Peregrinación al Sepulcro de Santiago el Mayor en Compostela.
Imagem de Santiago
El que emprende «el Camino de Santiago» desde cualquiera de sus puntos históricos de partida o lo toma en cualquier estación de sus trayectos tradicionales, entre os que ciertamente no es el menos importante el Camino Português, va a seguir un itinerario abierto y confurado por las huellas de los peregrinos que buscaban la Tumba del Apostolo Santiago en un punto lejano del «Finis Terrae» de Occidente. El «Camino de Santiago» es uno de los grandes «Caminos de la peregrinación Cristiana». Fruto ubérrimo de una Fe vivida con un hondo sentido pentencial y con un horizonte de amplia y neta Catolicidad. Fe que dio a luz en los albores de la Edad Media a Europa, como contienente homogéneo cultural y espiritualmente y sin la cual son impensables España y sus pueblos. Galícia ha llegado, incluso, a ser conocida como «Jakobsland», como «Terra de Santiago».
No hay, pues, mejor metedologia para aprovechar plenamente «El Camino de Santiago» que la de la oración. Es más, solo se conseguirá saborear todo el caudal de experiencias humanas, personales y comunitarias, que han originado «El Camino de Santiago» se el caminante lo concibe y lo realiza desde el comienzo como un itrinerario exterior y interior de toda su vida hacia Dios. El que no se cierre al lenguaje del paisage y de la naturaleza, a la comunicación con el otro - compañero de andadura, peregrino, hospedero, habitante del lugar... - al testimonio sumamente expressivo de ese otro paisaje histórico-artístico, que la Fe y la Cultura han creado con belleza inigualable a lo largo del Camino, ese se encontrará con la Palabra del Dios vivo, con Jesuscristo, el Señor, con su Evangelio, el de la Buena Nueva de la Salvación. Se puede iniciars «El Camino de Santiago» inmersos en las duda religiosa, en la oscuridad vital, en la desesperanza de la existencia rota, alejados de Dios... Todo ello no será obstáculo para una vivencia profundamente humana y cristiana de su recorrido, con tal que no pongamos al corazón el cerrojo de la superficialidad, de la ligereza, del orgulloso amor proprio o, lo que es peor, de la supercheria y de la avidez de engañosas sensasiones. El êxito o el fracaso del «Camino de Santiago» dependem de si el caminante sabe o no adoptar la dimensión cristiana del peregrino e si logra degustarla hasta el final de sus posibilidades. Como lo hicieram los Santos peregrinos, tan conocidos y tan queridos - Santa Isabel de Portugal, a Rainha Santa! -, en la Historia del Camino. Como lo mostró ejemplarmente con validez universal Maria, la Madre de Jesus,al vivir su vocación de Madre de Dios y Madre nuestra como una «peregrina de la Fe». A cuantos ha servido la peregrinación a Santiago de Compostela como la ocasión y la vivencia providencial para recobrar en la cercania de la Virgen, la Fe perdida!.
Plaza do Obradoiro
Agradecemos ao Autor este libro, que representa una buena ayudapara vivir la grande aventura, humana y cristiana del Camino Jacobeo, como un itinerario de oración, como una via egregia de encuentro con Nuestro Señor Jesuscristo, «Camino, Verdad y Vida de los hombres . Como vienem haciéndolo constantemente los buenos hijos de la querida hermana Portugal y lo harán especialmente, sin duda, en el Año Santo Compostelano 1993, para lucrar las gracias extraordinarias que el Santo Padre se ha dignado conceder para los que, durante este año de «La gran perdonanza», visiten el Sepulcro de nuestro Santo Apostol.
Peregrino
Desde Santiago de Compostela, desde la Iglesia del Apostol encomendamos y bendcimos a todos sus lectores y a todos los que se ponem en camino com el espíritu de peregrino
jacobeo para llegar a el su Sepulcro, el del primero de los Apóstoles que «bebió» el Cáliz del Señor.
Texto tirado do livro da autoria do escritor Eduardo Serafim
Felicito o amigo, não só pelo livro escrito que suponho ser um bem e uma ajuda para quem caminha até Santiago, como também pelas palavras de apreço do Arcebispo Don António, de facto deve ser uma honra de que deve orgulhar-se. Santiago é uma cidade que visito de quando em quando, me apraz o norte de Espanha, os Picos da Europa e fujo um pouco das cidades grandes, prefiro fazer depois o caminho perto do mar, estou mesmo a pensar ir em meados de Novembro. Gostei muito desta postagem li com todo o interesse e agradeço a partilha. Um grande e caloroso abraço.
ResponderEliminarGostei, felicidades, abraço
ResponderEliminarÀ minha distinta amiga Natália Nuno, com um abraço de sincera amizade, venho agradecer tão simpático comentário.
ResponderEliminarÉ para pessoas como a minha amiga que tenho a honra de escrever e postar no meu blog
Para a minha amiga Maria Freitas, o meu reconhecimento pelo simpático comentário.
ResponderEliminarForte abraço de amizade.